La tarde se sentia lúgubre junto con el frio imperante de la ciudad , lograba un conjunto taciturno. Un auto se estacionó ante la puerta de la funeraria, la cual estaba en la esquina de la avenida.
Bajó un hombre del auto con un estilo sobrio y único. Vestía una gabardina color cafe con unos lentes negros que le sentaban muy bien.
Acercandosé al encargado de la funeraria , dijo:
- Puede , por favor, atenderme que estoy apurado - de forma altiva.
- Si señor, dígame ¿En cuál modelo de féretro esta interesado ? - habló, el encargado.
- Uno decente , acojedor y bonito- respondió el señor.
El encargado lo llevó hacia una zona donde se podia apreciar los diferentes modelos, colores y diseños de féretros que la funeraria tenia.
Viendo los diversos féretros , una y otra vez, el señor se animó finalmente por un modelo en específico. Al hallar uno de su agrado sacó su tarjeta de crédito para proceder con el pago correspondiente.
El encargado contento por su venta comenzó la gestión de manera rápida, no sin antes alcanzar al señor unas fichas que debería llenar con los datos del difunto.
Terminando de llenar los datos , el señor entregó las fichas al encargado, los revisó detenidamente hasta que encontró algo que le llamo la atención.
- Señor, disculpe, ¿Podria explicarme este detalle? - preguntó , el encargado, apuntando la fecha y la hora de deceso.
El hombre respondió viendolo de manera extraña:
- La hora de deceso es a las 7:00 p.m de la noche con fecha de hoy. Los datos estan correctamente escritos, señor encargado -
- Pero señor, mi reloj marca las 5 y media de la tarde - repuso el encargado - creo que se esta equivocando -
- Al contrario, todo esta correcto y sin errores. Le aseguro que ni bien llegue a casa, habrá un difunto listo para las 7 de la noche -
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